sábado, 19 de marzo de 2011

Signos

Aquella calle oscura
del laberinto infinito,
se esconde una luz
de corto filtro.

¿Luz? Más bien fuego
junto al humo negro.
Resplandor en las caras,
de gozo efímero.

Amargo es el placer,
dulce es el instante,
todo lo dejaste atrás
solo por mancharte.

Pasó el tiempo con factura,
y te acuerdas de la noche
en aquella calle oscura,
sabiendo qué hiciste mal
en probar la luz sombría.

[Otro poema mío, espero que os guste.]

2 comentarios:

  1. Pero bueno Rares ¿de que vas? me encanta.¡este más que el anterior! Sube más inventate más.Preséntate al concurso del instituto.

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  2. Me alegro de que te guste. Quiero presentarme al concurso, espero que no se me olvide...

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